Ya sabéis que en nuestra asesoría intentamos mantenernos al día en todos los aspectos que puedan ser de interés para nuestros clientes, ¡hasta hablamos sobre ‘renting’! Velamos por vuestro bienestar en todos los sentidos, con nuestros seguros de salud y cuidados financieros, y el post de hoy quizás os pueda ayudar si alguna vez os habéis planteado cuál es la mejor manera de asegurar vuestra movilidad.

Todos conocemos las ventajas de tener un coche en propiedad. Autonomía total, mayor tiempo de amortización, elección de todos y cada uno de los detalles… Pero también conocemos las desventajas, como las visitas al mecánico, las temidas ITV o los problemillas que van surgiendo según van pasando los años y kilómetros.

El ‘renting‘ ha llegado para solucionar estos problemas, ¡aunque no es oro todo lo que reluce! A continuación, os exponemos las ventajas y desventajas de este sistema cada vez más conocido:

Ventajas del ‘renting’

La primera ventaja es económica. El ‘renting’ está planteado para personas que no quieran o puedan desembolsar una gran cantidad de dinero de una vez o no tengan claro qué será de ellas y su paradero en unos años. Os proponen una cuota fija y con ella se evitan sorpresas económicas de reparaciones, impuestos o revisiones, ya que la empresa se hace cargo de todo.

Como decimos, el renting supone un adiós al mecánico, y también a la ITV puesto que estrenaríais coche cada pocos años y no se cumplirán los plazos.

Este cambio rutinario hará que siempre tengáis a vuestra disposición la última tecnología en coches, con todos los aspectos positivos en seguridad y diseño que ello conlleva.

Gracias al renting evitaríais ataros a un combustible concreto durante muchos años. Ya sabéis que el mercado del petróleo cambia constantemente, ¡y no solo eso!, también la legislación de España e incluso de Europa. Si no nos conviene tener Diésel, por ejemplo, podemos solicitar un coche de gasolina en el siguiente cambio.

Si os cansáis del sistema renting y queréis tener un coche en propiedad, podéis solicitar a la empresa quedaros con el que tenéis pagando una cantidad que se estableciera en la firma del contrato.

Desventajas

A diferencia de cuando compráis un coche desde el primer momento, no podéis elegir el modelo, los accesorios o los extras que tendrá vuestro vehículo. De igual modo, tampoco podréis hacerle modificaciones, ya que tendrá que entregarse tal y como la empresa lo cedió.

Ojo con el tipo de contrato de renting que realizáis, se fijarán unas pautas inamovibles, como el número de kilómetros que realizamos en el periodo que dure el contrato. Si os excedéis, tendréis que pagar un sobrecoste.

Los costes de reparación están cubiertos en el renting, pero si se considera que el daño del vehículo se debe a un mal uso, tendréis que haceros cargo de esa gestión.

Si os planteáis el renting para un periodo superior a los 8 años, os adelantamos que no es rentable. Además, las casas de coche establecen diferentes límites de tiempo en sus contratos.

Si decidís devolver el coche antes del plazo fijado, tendréis una penalización. Existen contratos de renting flexibles que la omiten, pero su coste es mayor.

Como veis, las circunstancias de cada hogar marcan las decisiones respecto al renting o a la compra de coches. Esperamos haber aclarado algunas dudas sobre este tema cada vez más conocido, y os recomendamos que tenéis algún tipo de consulta sobre vuestro vehículo, sus gestiones o su seguro, nos llaméis sin ningún compromiso.